Desde las compensaciones económicas y los beneficios sociales hasta las posibilidades de crecimiento en la empresa. La Employee Value Proposition (EVP) recoge la propuesta de todas las ventajas que pueden obtener tanto las personas candidatas como las que ya integran tu compañía.
¿Por qué los perfiles más potenciales deberían elegir tu organización para desarrollarse profesionalmente? A grandes rasgos, esta es la cuestión a la que debe responder una Employee Value Proposition (EVP), tanto para atraer al mejor talento como para fidelizarlo en el tiempo.
Si quieres crear una propuesta de valor atractiva y efectiva para fortalecer tu estrategia de reclutamiento y, a la vez, nutrir tu employer branding, esta es tu guía definitiva para conseguirlo. Conoce su importancia y las claves para crear una EVP que marque la diferencia.
¿Qué es la Employee Value Proposition o propuesta de valor a la persona empleda?
Una Employee Value Proposition incluye todos los beneficios que una empresa ofrece al talento por sus capacidades, habilidades y contribución al negocio. Algunos ejemplos de estas ventajas, que pueden ser tanto tangibles como intangibles, son las oportunidades de desarrollo, las compensaciones económicas, la flexibilidad horaria y la conciliación, los programas de bienestar laboral, entre otras.
Asimismo, una EVP representa los motivos por los que las personas escogen la empresa como un lugar idóneo donde trabajar, diferenciándola de otras opciones en el mercado de trabajo. En un entorno laboral cada vez más competitivo, construir y comunicar efectivamente una propuesta de valor auténtica y diferenciadora se ha convertido en una ventaja estratégica clave para cualquier organización.
Por qué la EVP es fundamental en el contexto laboral actual
La Employee Value Proposition tiene una clara repercusión sobre la atracción y la fidelización del talento. Gracias a una propuesta de valor, tu empresa puede optimizar procesos y técnicas de selección, reduciendo la inversión sobre el reclutamiento y, además, disminuir la rotación de personal, porque las personas empleadas querrán permanecer y crecer en la compañía.
De forma específica, podemos destacar tres aspectos esenciales por las que tener una EVP es una buena elección:
- Reduce la competencia basada en el salario: una EVP bien definida permite a la empresa destacar por ofrecer más beneficios que la remuneración. De hecho, las personas candidatas y empleadas cada vez ponen más el foco en otras ventajas como la flexibilidad horaria, un entorno laboral positivo o las oportunidades de aprendizaje a las que puedan acceder, entre otras afines que enriquecen el salario emocional.
- Define los objetivos de reclutamiento: la EVP es una estrategia clave para identificar y comunicar claramente lo que hace única a la empresa. Esto te permite atraer candidatos cualificados alineados con la cultura empresarial y con los objetivos empresariales. ¿El resultado? Procesos de selección mucho más eficientes y acertados.
- Fideliza a las personas empleadas: comunicar y transmitir correctamente la EVP contribuye a que la plantilla se sienta más satisfecha, motivada y productiva en su día a día. Al sentirse más valorados, será menos probable que busquen otras oportunidades profesionales.
- Te ayuda a llegar a todo tipo de personas candidatas: al fortalecer el employer branding, la EVP favorece la atracción de los mejores talentos, incluso aunque estos no se encuentren en búsqueda activa de empleo.
¿Cómo impacta la propuesta de valor en el compromiso y la motivación de las personas empleadas?
La Employee Value Proposition tiene un doble efecto: atraer talento potencial y también influir positivamente sobre la motivación y el compromiso de las personas que ya integran la empresa.
Cuando el talento se siente reconocido, con acceso a beneficios que van más allá del salario y vinculado emocionalmente con la organización, se fomenta su sentido de pertenencia y, con ello, sus ganas de aportar su mayor rendimiento. Lo que, a su vez, incide directamente sobre la productividad, la reputación de la marca empleadora y su capacidad para fidelizar a su equipo.
Elementos clave en una EVP
Ahora que ya te vas haciendo una idea de la importancia que tiene una Employee Value Proposition y de su impacto sobre la satisfacción y la productividad de las personas en el entorno laboral, debes saber que hay una serie de elementos que hacen de ella una propuesta ganadora para satisfacer las necesidades del talento y destacar las fortalezas de la empresa:
- Compensación y beneficios: al margen de tener una política salarial competitiva, aquí entrarían las primas, bonos, incentivos y otras formas de compensaciones económicas. Además, se contemplan ventajas en especie y estratégicas como seguros médicos, planes de bienestar, planes de pensiones, flexibilidad laboral, teletrabajo, etc., que demuestran que la organización valora a su personal.
- Desarrollo profesional: se incluyen las oportunidades de aprendizaje para reforzar y obtener nuevas habilidades y competencias, como programas de formación o planes de carrera personalizados, por ejemplo.
- Cultura y ambiente laboral: un entorno de trabajo positivo con valores claros y una buena dinámica de equipo es un aspecto que nutre una Employee Value Proposition. La cultura corporativa debe favorecer la colaboración, la inclusión y la diversidad de puntos de vista.
- Flexibilidad laboral: ofrecer la posibilidad de flexibilizar los horarios beneficia tanto a las personas empleadas como a la propia empresa, ya que permite que el trabajo se desarrolle en el horario y lugar más productivo para cada profesional.
- Reconocimiento y recompensas: reconocer la labor del talento tanto a nivel individual como colectivo refuerza su compromiso y motivación. Esto puede incluir premios, promociones o agradecimientos en público, por ejemplo.
- Seguridad laboral: garantizar estabilidad en el puesto de trabajo también es fundamental para transmitir confianza y posibilidad de desarrollo en la empresa a largo plazo.
En general, los elementos que componen una EVP deben dar motivos al talento para querer incorporarse en tu empresa y/o quedarse en ella, haciendo que cada persona se sienta alineada con la cultura organizacional y motivada a dar lo mejor de sí misma para contribuir al crecimiento de la compañía.
¿Cómo crear una Employee Value Proposition efectiva?
Diseñar una Employee Value Proposition requiere un enfoque estratégico y estructurado que combine análisis, colaboración y comunicación. Estos son los pasos que no debes dejar pasar para construir una propuesta de valor que atraiga y fidelice al talento imprescindible de tu empresa:
Análisis de la situación actual
El primer paso es evaluar el estado de la organización en materia de cultura empresarial, política de compensación laboral y grado de satisfacción del equipo con ello. Este análisis te permitirá identificar fortalezas y áreas de mejora.
Apoyarte en el uso de un software de RRHH integral, con cuadro de mando para analítica de RRHH, puede ayudarte con este cometido, ya que podrás acceder fácilmente a datos relevantes sobre la rotación de personal, el absentismo, el nivel de satisfacción, etc. Eso sí, recuerda la importancia de poner la tecnología al servicio del conocimiento, equilibrando expertise y soluciones disruptivas para realizar una correcta interpretación de los datos y asegurar una toma de decisiones acertada. Nuestro Enfoque 360º en gestión de personas único en el mercado puede ser tu gran aliado en este sentido.
Benchmarking de competidores
Otro paso esencial es investigar qué beneficios ofrecen las empresas de la competencia y cómo puedes diferenciarte de ellas. ¿Qué es lo que más valoran de trabajar en la compañía? ¿Qué ventajas les gustaría recibir? Identifica las expectativas en las personas candidatas y empleadas, detecta qué valoran más y toma nota de las tendencias que funcionan mejor. Con toda esta información garantizarás que tu EVP sea lo suficientemente competitiva.
Feedback de personas empleadas actuales y potenciales
Al construir una EVP también debes tener en cuenta las opiniones y sugerencias de las personas que integran la empresa y de aquellas candidatas a formar parte. Puedes emplear encuestas de satisfacción, entrevistas personales y grupales, así como cualquier método que te acerque a sus percepciones y aspiraciones. Incluso, la entrevista de salida proporciona información que ayuda a detectar áreas de mejora en este caso.
Igualmente, para estimar los beneficios laborales más adecuados es muy importante evaluar su desempeño. Medir el cumplimiento te dará información sustancial para crear una propuesta de valor más alineada con las necesidades y expectativas del talento.
Definición de mensajes claros y potenciales
No olvides comunicar la EVP a través de mensajes transparentes y efectivos. Asegúrate de que todas las personas son conocedoras de la propuesta de valor. Para ello, puede ser interesante implementar un portal de la persona empleada, ya que esta solución facilita la interacción entre todos los miembros del equipo de forma continua y eficaz.
Estrategias de medición y ajustes
¿Qué tan buen resultado está dando la EVP? Medir la repercusión de la propuesta de valor es indispensable para saber si está funcionando como debería, tanto en materia de atracción como en fidelización del talento. Integrar un software de RRHH con cuadro de mando para analítica de RRHH te va a permitir monitorear los resultados y ajustar las estrategias según sea necesario.
Comunicación efectiva de la EVP
Tan importante es construir la EVP con efectividad, como comunicarla al talento de forma adecuada, empleando mensajes adaptados al público objetivo y que reflejen la realidad de la compañía. Para comunicar la EVP a los perfiles potenciales puedes utilizar múltiples canales y medios; desde redes sociales hasta eventos de reclutamiento.
También es esencial integrarla en el día a día de las personas que ya integran la empresa y, para ello, es recomendable emplear canales de comunicación interna como boletines informativos y un portal de la persona empleada, donde difundir la propuesta de valor al detalle y actualizar su información siempre que sea necesario.
Errores comunes en el desarrollo de la propuesta de valor y cómo evitarlos
Hay ciertos errores que pueden poner en riesgo el buen funcionamiento de la propuesta de valor. Toma nota para prevenirlos:
- Ser demasiado genérico: una EVP aplicable a cualquier organización no tiene ese valor diferencial que la hace única. Identifica que distingue a tu empresa y refléjalo en la propuesta.
- Hacer muchas promesas: genera frustración y desconfianza entre las personas empleadas y potenciales, a la vez que afecta negativamente a la reputación empresarial.
- Ignorar las aportaciones de las personas empleadas: una propuesta de valor dirigida al talento debe escuchar las necesidades, expectativas y aspiraciones de las personas implicadas. No tenerlas en cuenta dará lugar a una EVP desconectada de la realidad.
- Centrarse únicamente en el salario: aunque la compensación económica es importante, cada vez más, las personas candidatas y empleadas valoran otros aspectos como la flexibilidad, las oportunidades de crecimiento profesional o la calidad del ambiente de trabajo, entre otros.
- No alinearse con los valores de la empresa: la EVP debe estar en consonancia con la misión, visión y propósito de la organización.
Ejemplos de Employee Value Proposition
Para acabar, vamos a ver algunos ejemplos concretos de cómo se plantea la Employee Value Proposition en función del sector, el tamaño y la cultura de cada organización:
- Empresa de larga trayectoria: compañía con más de 50 años de experiencia en el sector decide renovar su EVP para atraer talento joven. Para ello, destacan aspectos como la estabilidad laboral, los beneficios sociales y programas de acompañamiento para sus primeras etapas de su carrera. Con esta propuesta, la empresa en cuestión incorpora a perfiles profesionales con ideas innovadoras que se complementan con el expertise del talento senior.
- Organización internacional en desarrollo: una empresa del sector logístico en plena expansión a nuevos mercados europeos desarrolla una EVP centrada en la movilidad internacional y la diversidad cultural. Asimismo, incorpora un programa formativo de aprendizaje de idiomas, con diferentes actividades multiculturales en sus oficinas y ventajas adicionales para apoyar la reubicación. Con esta estrategia logra captar talento global y mejorar su posicionamiento como marca empleadora internacional.
- Empresa tecnológica en crecimiento: startup tecnológica de rápido crecimiento necesita fidelizar el talento en un entorno altamente competitivo. En este escenario, crean una EVP basada en la flexibilidad laboral, oportunidades de formación continua en tecnologías emergentes y un sistema de recompensas mensual por logros grupales e individuales. Los efectos inmediatos de estas acciones son una mayor satisfacción y ganas de crecer en la compañía a largo plazo.
- Institución sanitaria con alta rotación: centro de salud de referencia define su EVP centrada en el bienestar de su plantilla para minimizar la rotación de personal. Para conseguirlo, implementa programas de salud mental, jornadas de trabajo más equilibradas y oportunidades de especialización médica. ¿Qué logra a cambio? Mayor compromiso y satisfacción del personal a la par que una mejor reputación en su sector profesional.
En definitiva, diseñar y comunicar una Employee Value Proposition sólida no solo es clave para atraer y fidelizar al talento, sino también para construir una organización comprometida y preparada para afrontar los retos del mercado laboral actual. Las empresas que invierten en sus personas y en una gestión integral del talento logran un impacto positivo tanto de forma interna como externa, mejorando su reputación corporativa.
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